La verdad, soy demasiado diferente ahora, ya he perdido mucho mi poder de sorprenderme por las cosas.
Y todo es muy diferente para mí. Recuerdo cuando todo era nuevo, cuando cada experiencia era muy excitante, cuando podía pasar por cada lugar y abrir mis ojos como lo hacen los turistas de una ciudad. Ahora casi nada tiene el mismo valor que tenía para mi…la vida se ha encargado de robarme esa ilusión que cada día traía para mi. Después de cada fracaso, de cada decepción, de cada sueño roto, de cada promesa sin cumplir…después de todos estos días enfrentando un mundo difícil, ya es cada vez mas complicado creer que todo puede ser como siempre quise.
Hoy por fin comprendo las palabras de un viejo amigo, que a mis 17 años me dijo lo bello que era tener la inocencia que podía ver en mi…y yo no comprendía que era aquello puro que el decía ver…pero ahora, cuando el mundo se encargó de hacerme crecer, puedo entender qué era lo que el decía en aquellos días felices.
Aunque la vida tiene sus momentos bellos, últimamente no he tenido el placer de vivirlos, y aún no tengo esa sensación de bienestar, de seguridad, de fortaleza…aún se humedecen mis ojos cuando pienso en mis fracasos y siento que me tiemblan los huesos para levantar el vuelo…aún no tengo claro mi horizonte y eso es verdaderamente asustador…no quiero quedarme mirando como se me pasa la vida sin sentirme bien, no quiero ver como todos van teniendo sus logros y yo ni siquiera tengo claras mis metas, no quiero ver como me despierto del sueño cuando es ya demasiado tarde para enfrentar mi día.
Quiero saber que quiero, quiero sentirme bien conmigo misma y con mi vida, quiero sentir que estoy bien, y no quiero sentir como se me quiebra la voz al saber que estoy en esta situación.
Comentarios
Que bueno que a tu edad ya seas sensata y sepas que es lo que realmente quiere de la vida.
Volveré a visitar el blog de vez en cuando.